Acción subversiva de Pepe Mujica y Tupamaros en 1964
En 1964, José “Pepe” Mujica formó parte de un asalto a una empresa textil como miembro del Movimiento de Liberación Nacional–Tupamaros. El objetivo de la acción era financiar actividades políticas mediante el robo de fondos y suministros.
La intervención concluyó con la detención de varios integrantes y el supuesto desmantelamiento de parte de la red urbana de los Tupamaros. Mujica quedó entonces bajo custodia policial tras el operativo.
Operaciones de clandestinidad de Pepe Mujica: toma de Pando y emboscada
Toma de Pando y vida oculta
En 1969, Mujica abandonó la vida pública y se internó en la clandestinidad para integrarse en las filas del MLN–Tupamaros. Ese mismo año participó en la denominada “toma de Pando”, una acción dirigida a capturar armamento y ponerse a salvo frente al avance policial.
La operación implicó el asalto a dependencias militares y la fuga organizada de varios combatientes hacia zonas rurales. El éxito parcial de la incursión consolidó la estrategia de guerrilla urbana del grupo.
Identificación en Montevideo y ataque a tiros
Un año después, en 1970, la policía localizó a Mujica en un bar de Montevideo. Al intentar detenerlo se generó un intercambio de disparos que le provocó seis impactos de bala.
A pesar de la gravedad de las heridas, Mujica sobrevivió y fue trasladado bajo custodia a un hospital. El incidente reforzó el perfil público de los Tupamaros y las contramedidas represivas del Estado.
Evasión masiva de Pepe Mujica y gran fuga de Punta Carretas
En setiembre de 1971 se materializó la mayor fuga carcelaria en la historia de Uruguay, desde el Penal de Punta Carretas. Cerca de 110 presos, entre ellos Mujica, escaparon utilizando un túnel excavado durante meses.
El planeamiento incluyó el aprovisionamiento de herramientas, guardias rotativos y la complicidad de internos en distintas áreas. La evasión evidenció fallas en la seguridad penitenciaria y marcó un hito en las tácticas de resistencia interna.
Reclusión de Pepe Mujica y métodos de tortura dictatorial
Recapturado en 1972, Mujica permaneció encerrado hasta 1985 bajo la dictadura militar. Durante más de catorce años fue sometido a golpes, humillaciones y descargas con picana eléctrica.
El aislamiento absoluto prolongado derivó en complicaciones de salud física y mental. Las prácticas de tortura incluyeron encierro en celdas de reducidas dimensiones y privación de todo contacto externo.
Las condiciones carcelarias rigieron con estrictos horarios, censura de correspondencia y vigilancia constante, sin acceso a asistencia médica adecuada para las secuelas del maltrato.