El fenómeno climatológico conocido como “El Niño” persiste en afectar a México desde el año 2023, y se anticipa que su influencia continuará dejando su marca en varios estados de la República Mexicana. De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y Espacio (NASA) de Estados Unidos, este fenómeno ha desencadenado cambios notables en la temperatura y las condiciones climáticas en diversas partes del mundo.
En México, “El Niño” ha contribuido al aumento de la temperatura, especialmente en las regiones del norte del país. El Servicio Meteorológico Nacional ha registrado una incidencia elevada de temperaturas más cálidas de lo normal, así como condiciones húmedas o secas en temporadas inusuales. Esta situación ha elevado la probabilidad de desastres naturales, como sequías e inundaciones, debido a la formación de tormentas.
Se pronostica que durante este año, “El Niño” se intensificará entre los meses de junio y julio, siguiendo la tendencia del año pasado. Según el Meteorológico Nacional, hay un 73% de probabilidad de que este fenómeno se mantenga en los próximos meses, volviendo a condiciones neutrales entre abril y junio de 2024.
Los estados que podrían sufrir mayores impactos son aquellos ubicados en el norte del país, incluyendo Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sinaloa, Durango y las dos Baja Californias. Estas regiones podrían experimentar una disminución en las precipitaciones durante el verano y condiciones más secas durante el otoño e invierno.
Por otro lado, los estados del centro y sur de México podrían experimentar climas más húmedos, aunque también podrían enfrentar periodos de sequía. En este grupo se encuentran estados como Yucatán, Chiapas, Oaxaca, Campeche, Tabasco, así como el Estado de México y la Ciudad de México.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informa que la temperatura superficial del mar en el Pacífico ecuatorial ha superado los valores normales, indicando la presencia de El Niño. Se observan anomalías positivas de radiación saliente de onda larga en diversas regiones, señalando una inhibición de la nubosidad y precipitación.
La Conagua destaca que en el Pacífico ecuatorial, la temperatura superficial del mar ha alcanzado valores entre 27.2 y 32.6 °C en la región Niño 4, de 26.4 a 30.6 °C en Niño 3.4, de 24.0 a 30.0 °C en Niño 3, y de 21.6 a 28.0 °C en Niño 1+2 (Figura 1). En el mismo período, las anomalías en las regiones Niño 4, Niño 3.4, Niño 3 y Niño 1+2 fueron 1.4 °C, 1.7 °C, 1.8 °C y 0.8 °C, respectivamente.
La Conagua también destaca que las anomalías positivas de radiación saliente de onda larga predominaron en 2023 en el norte y sureste del Océano Pacífico ecuatorial, oriente de China, centro de México y al occidente de Australia, indicando la inhibición de nubosidad y precipitación. Por lo tanto, se espera un aumento en la temperatura en el norte, especialmente a mediados de año.
No obstante, para este domingo 28 de enero, se han presentado altas temperaturas en diversas regiones del país, con máximas de 40 a 45 °C en Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán y Guerrero; de 35 a 40 °C en Sinaloa, Oaxaca (costa) y Chiapas (costa); y de 30 a 35 °C en Sonora (sur), Morelos (sur) y Puebla (suroeste).
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