El rumor estuvo en el aire desde hace mucho, pero ahora Microsoft lo hizo oficial en el marco del E3 2019: sí está trabajando en una nueva consola sucesora del Xbox One y sí se le conoce por el momento como Project Scarlett.
El anuncio lo hizo Phil Spencer, head de Xbox, quien dijo que el futuro del gaming está en la rapidez, en la síntesis de procesos y en hacer de los tardados loadings cosa del pasado.
Spencer luego dio entrada a un video que brinda una mejor noción de lo que Microsoft pretende con Project Scarlett.
Para Microsoft el futuro del gaming no solo es la PC ni las consolas ni el juego móvil, sino todos. También quieren que los usuarios jueguen lo que quieran, con la gente que quieran, en el dispositivo que sea, y que sea más fácil jugar y quedarse en el juego.
Por otro lado, están seguros de que los usuarios ya no quieren tiempos de carga.
Con Project Scarlett están apostando por una máquina que elimine esas pausas, pues tiene un procesador diseñado en casa, cuatro veces más poderoso que el del Xbox One X, la consola de más altas capacidades de este momento.
Microsoft promete resoluciones y framerates que el ojo humano jamás ha visto, llegar a los 120fps en 8K, y a una tecnología de trazado de rayos en tiempo real, de siguiente generación.
La empresa creó una nueva generación de unidades de estado sólido (SSD) para usarlas como RAM virtual, con lo que se consiguen velocidades hasta 40 veces mayores que las de las consolas de este momento.
Generar más vida en los mundos virtuales y llevarla a los jugadores de una manera nunca antes vista, inmersiva, y moverse a través de esos mundos sin esperar, es lo que quiere Microsoft con su consola de siguiente generación.
Otra promesa es que los usuarios de Game Pass jugarán al instante, gracias a la reducción de los tiempos de espera, y una más es que a los jugadores se les brindará la posibilidad de conectarse entre ellos a través de distintos dispositivos y plataformas.
Las especificaciones de Project Scarlett proporcionadas hasta el momento por Microsoft son:
- 4K nativo a 60fps, escalable hasta 120fps
- SSD de siguiente generación, para una experiencia 40 veces más rápida que las que brindan las consolas de este momento
- Trazado de rayos acelerado por hardware
- Juegos, accesorios y carrera conservados por el usuario
- Capacidad para 8K
Con este anuncio, queda claro que Microsoft está explorando una vía similar a la que Sony está trabajando con el PlayStation 5.
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