Durante muchos años Microsoft intentó hacerle frente a Android y iOS con Windows Phone, un sistema operativo interesante y con la clara idea de unificar todos los productos de Microsoft en un ecosistema robusto. Sin embargo, la empresa nunca pudo sacar a flote a Windows Phone, y todos sabemos cómo terminó la historia, de hecho, Bill Gates ya ha mencionado como este “error” les terminó costando 400 mil millones de dólares.

Y aunque Microsoft abandonó su sistema operativo para
dispositivos móviles, hubo muchos equipos que se quedaron en fase de pruebas
cuando Windows Phone todavía luchaba por su vida en el mercado, por lo que nos
extraña que la firma no los haya dejado salir del laboratorio.

Es cierto que probablemente estos equipos no iban a salvar a Windows Phone, pero quizá si hubieran generado algunas ventas en los distintos mercados del mundo.

Los teléfonos Lumia que nunca vieron la luz del día

Uno de los equipos que llama la atención es el Nokia McLaren, el cual sería una renovación del Lumia 930, es decir, era un gama alta en toda su extensión para los años que corrían. El diseño era similar al de otros Lumia, de hecho, la gente de Windows Phone pudo probar el dispositivo mientras estaba en fase de desarrollo.

Una de las características estrella de este dispositivo era
su tecnología similar al 3D Touch pero sin la necesidad de tocar la pantalla,
algo que sin duda le hubiera hecho ganarse las miradas por innovación, pero que
probablemente tampoco hubiera sido una función revolucionaria.

La cámara también era una de las cosas más llamativas de este Lumia, que no solo tenía un enorme módulo de 20 megapixeles, sino que la cámara siempre fue una de las cosas que destacó a la serie Lumia del resto de sus competidores.

Honjo: un Lumia de gama de entrada

Microsoft también canceló el lanzamiento del conocido como Honjo, un Lumia de gama de entrada que aparentemente llevaría un Snapdragon 210 con una resolución de pantalla de 720p.

Sin embargo, a pesar de que se trataba de un equipo
económico no podemos negar que su diseño era mucho más atractivo que el de
muchos smartphones de gama media del 2015. Y es que justamente los teléfonos de
Microsoft siempre destacaron por su diseño.

Mercury: una tablet para competir contra el iPad

Uno de los gadgets que tampoco logró salir del laboratorio fue Mercury, una tablet con Windows Phone diseñada por Microsoft que llegaría para complementar el catálogo de las Surface en aquellos años.

De esta tablet se sabe que tendría una pantalla de entre 7 y
8 pulgadas, pero de desconocen los demás componentes de hardware como el
procesador, RAM, o los detalles de la cámara.

Moonraker: al “Apple Watch” de Microsoft

Moonraker era el nombre clave del reloj inteligente de Microsoft bajo la marca Nokia. En ese momento Microsoft quería que este reloj fuera solo una extensión del teléfono, por lo que no sabemos qué tipo de sistema operativo llevaría el dispositivo, pero sabemos que permitiría sincronizarse perfectamente don Windows Phone para recibir notificaciones, realizar llamadas desde el reloj, enviar SMS y también incluiría carátulas personalizables.

Algunos rumores indican que pocas personas pudieron ver este dispositivo a puerta cerrada durante el MWC del 2015, sin embargo, al final la empresa nunca lanzó este dispositivo al mercado.  

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Seguramente te enteraste lo que sucedió el pasado jueves 7 en el Auditorio Nacional de la CDMX. Después de mucho tiempo de espera, por fin llegó el día y la hora y, me imagino, todo eran nervios dentro del equipo de producción.

Estuve presente gracias a que Spotify México me invitó, como a muchos otros colegas de tecnología y en general, el evento salió bien. Al tener una transmisión en televisión, la cosa es diferente, ya que muchos pensaron (me incluyo), que sería una entrega tipo los Grammys en cuanto al formato. Pero no. La disrupción digital ha cambiado todo, me explico.

Los premios Grammy, que serían el equivalente a los premios Oscar del cine, son elegidos por un grupo de personas que “deciden” qué artista o canción debe ganar cada año. Se celebran desde 1959 y son organizados por la Academia Nacional de Artes y Ciencias de la Grabación, obviamente todo esto en Estados Unidos. Es decir, un grupo de personas (desconozco la cantidad) votan a mano y deciden de forma unilateral quiénes ganan. Tomo de Wikipedia el proceso de selección:

“Las compañías discográficas y personas pueden presentar grabaciones a ser nominados. Las nominaciones se realizan en línea y una copia física del trabajo se envía a la Academia Nacional de Grabación de Artes y Ciencias. Una vez que se introduce un trabajo, sesiones de revisión se llevan a cabo, por más de 150 expertos de la industria discográfica, para determinar si el trabajo es seleccionado y así poder entrar en la categoría correcta para la nominación oficial.”

Así es que, además de que es un trabajo evidentemente norteamericano, finalmente la decisión de los “expertos” puede estar influenciada por muchos factores, desde gusto personal hasta, por supuesto, niveles de ventas.

Regresemos a los Spotify Awards. Aquí la cosa cambia, o quiero creer que es diferente. ¿Por qué? Porque los que decidimos quiénes son los “mejores” artistas somos los usuarios. Hay que tener un voto de confianza con el sistema de conteo de Spotify, ya que simplemente creemos que todo es súper transparente. Y la verdad no tiene porque no serlo. Al servicio de música le da igual quién gane, ellos cobran y pagan me imagino que más o menos lo mismo por cada reproducción (para el caso de los que tenemos Premium).

Así es que, si piensas que los premios Spotify fueron desastrosos en cuanto a producción, tienes un punto. No fue un evento 100% perfecto, pero tal vez sí un 90%. Que no debería de pasar, estoy de acuerdo, que debió salir todo impecable, estoy de acuerdo, que no le abrieron el micrófono a no sé quien, estoy de acuerdo.

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Pero este mundo ya cambió y por si no te has dado cuenta, ahora los usuarios somos quienes decidimos qué es “lo mejor”.

Y habrá quienes digan: “Ganó el regetón, que asco”. En gustos se rompen géneros y si no “perreas” con el regetón, adelante, ese no es el problema. Ese es tu personal punto de vista, muy válido, pero hay una gran diferencia en decir eso y comentar que “los premios fueron una porquería”.

Porque entonces, la solución sería que se hicieran diferentes versiones de estos premios para que en cada una gane tu música favorita, entonces sí, leeríamos comentarios como “Excelentes los Spotify Awards, por fin ganó la norteña”. Entonces, vendría el comentario “Los premios son una basura, ganó pura música norteña” y así hasta el infinito.

El mundo sigue cambiando y estos premios contribuirán a este cambio y dentro de 50 años podremos leer en Wikipedia “Los premios Spotify donde los usuarios seleccionan las mejores canciones y artistas comenzaron en el 2020”.

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