Persistencia del derrame de aguas negras y vertidos de aguas residuales en Mazatlán
Desde hace más de 25 años, vecinos de la colonia Independencia en Mazatlán han reportado derrames constantes de aguas negras en el cruce de avenida De las Rosas, Bernardo Sánchez y Circunvalación. El vertido ha afectado la carpeta asfáltica y creado zonas pantanosas sobre las vías de tránsito.
Las fugas de aguas cloacales se presentan de forma recurrente, incluso tras jornadas de limpieza que resultan insuficientes para contener el problema. En cada episodio de lluvia, el sistema de drenaje colapsa y provoca mayores acumulaciones de residuos líquidos.
Las autoridades municipales han intervenido esporádicamente con camiones vactor, pero la solución temporal no ha detenido las filtraciones. La infraestructura subterránea muestra signos de desgaste y fracturas que requieren un diagnóstico técnico especializado.
Acumulación de basura y maleza en colonia Independencia, Mazatlán
Junto al vertido continuo de aguas residuales, se ha observado un vertedero improvisado de basura doméstica y desechos sólidos. Plásticos, restos de comida y envases vacíos se concentran en el punto de cruce, favoreciendo la proliferación de vectores.
El crecimiento desmedido de maleza cubre las orillas de la vialidad y dificulta la visibilidad de los transeúntes. Arbustos y hierbas altas invaden los pasos peatonales, obligando a los residentes a improvisar atajos entre la vegetación.
La falta de un plan de desazolve y recolección periódica ha convertido el sitio en un foco de contaminación. Vecinos señalan que la limpieza manual no resulta suficiente para mantener despejadas las áreas críticas.
Riesgos sanitarios para población vulnerable en Independencia
La combinación de aguas servidas estancadas y desechos acumulados agrava las condiciones de higiene en la zona. El ambiente favorece la aparición de plagas y enfermedades gastrointestinales.
La cercanía de un asilo de ancianos, ubicado justo detrás del vertedero, aumenta el peligro para residentes de edad avanzada, así como para los niños que transitan a diario por el área.
Exposición de los niños a contaminantes
Algunos menores utilizan la banqueta para trasladarse hacia centros escolares cercanos, exponiéndose a lodos contaminados y malos olores. Las tareas de limpieza improvisadas no eliminan patógenos presentes en el agua estancada.
Padres de familia alertan sobre el riesgo de infecciones cutáneas y problemas respiratorios, asociados a la inhalación de gases provenientes de la descomposición de materia orgánica.
Impacto en los adultos mayores del asilo cercano
Los residentes del asilo, con sistema inmunológico más frágil, enfrentan un entorno con riesgo de vectores como moscas y roedores. La ruta de acceso al centro de cuidado pasa justo por las áreas afectadas.
Personal de la institución ha reportado episodios de malestar estomacal y malestar general en algunos internos, atribuidos a la contaminación ambiental del sitio adyacente.




















































































