Alerta de Mar de Fondo y oleaje intenso en costas del Pacífico Mexicano
El viernes 13 de junio comenzó una alerta por Mar de Fondo que afecta desde Chiapas hasta Sinaloa, incluyendo la entrada del Golfo de California, las Islas Marías y Revillagigedo. La marejada persistirá hasta el 16 de junio, manteniendo condiciones adversas en las playas y zonas portuarias.
La advertencia abarca tanto la región continental como la península de Baja California, donde se registrará un ondaje de fondo con gran energía, aunque el clima local presente tranquilidad. Es importante considerar el avance de este oleaje intenso al planificar actividades costeras.
Zonas afectadas y duración de la alerta
El área de riesgo se extiende a lo largo de más de mil kilómetros de litoral en el océano Pacífico mexicano. Además de la costa continental, incluye islas cercanas donde el oleaje puede resultar más peligroso por la topografía del lecho marino.
La vigencia de la alerta está programada para un periodo de tres días. Hacia el 16 de junio se prevé un decrecimiento gradual en la altura de las olas y una disminución de las corrientes de arrastre.
Definición y riesgos del fenómeno
El Mar de Fondo se origina en tormentas lejanas que generan series de olas ordenadas. Al llegar a la costa, esas olas concentran su fuerza, elevando el nivel del mar y fortaleciendo corrientes de resaca.
Este tipo de ondaje puede arrastrar a nadadores, golpear embarcaciones pequeñas y saturar muelles. Las zonas bajas costeras son especialmente vulnerables a inundaciones temporales.
Características del oleaje intenso y corrientes de resaca
Se estima un oleaje de 7 a 9 pies (2,1 a 2,7 metros) con un periodo de 18 a 20 segundos entre crestas. Estos parámetros reflejan un ondaje de fondo organizado y persistente.
Las corrientes de arrastre asociadas a este fenómeno alcanzan intensidad elevada. Representan un riesgo significativo para bañistas y pequeñas embarcaciones en las primeras franjas costeras.
Altura y periodo de las olas
La medición de la altura en pies indica que las olas pueden superar los dos metros en promedio. Este tamaño dificulta maniobras de rescate y desplaza grandes volúmenes de agua hacia la costa.
El mayor periodo entre olas implica que el mar retendrá energía durante más tiempo. Los intervalos de 18 a 20 segundos aumentan la fuerza de impacto en cada rompiente.
Peligro de corrientes intensas
Las corrientes de resaca se forman cuando el agua regresa al mar con velocidad concentrada por espacios estrechos. Su fuerza puede arrastrar personas y escombros mar adentro.
En playas con topografía irregular, estas corrientes resultan más impredecibles. Quienes no conozcan el entorno costero deben extremar precauciones y mantenerse lejos del agua.
Recomendaciones de seguridad marítima en marejada
La principal medida de prevención es no ingresar al mar ni realizar actividades acuáticas en zonas con banderas rojas. El respeto a la señalización avisa del riesgo inminente de arrastre y fuerte oleaje.
Es fundamental que la población costera y visitantes planifiquen sus desplazamientos con base en esta alerta y eviten exponerse a condiciones peligrosas.
Indicaciones para bañistas y turistas
Se recomienda permanecer sobre la arena y no aproximarse al agua. El oleaje intenso provoca rompientes violentas que pueden desequilibrar a quienes estén en la orilla.
Respetar las instrucciones de salvavidas y no cruzar las áreas delimitadas por banderas. Estas demarcan zonas con corrientes de resaca y alto riesgo.
Consejos para pescadores y navegantes
En el puerto, revisar las condiciones de las embarcaciones antes de zarpar y asegurar todos los elementos de cubierta. La marejada puede ocasionar golpes de mar y movimientos bruscos.
Suspender operaciones en caso de que el oleaje impida maniobras seguras. Mantener comunicación constante para seguimiento de avisos oficiales y actualizaciones meteorológicas.
