Madagascar.— Una unidad militar insurrecta, el Cuerpo de Administración de Personal y Servicios del Ejército de Tierra (CAPSAT), anunció el martes la supresión de la Constitución y la toma del poder. Su líder, el coronel Michael Randrianirina, proclamó la asunción del mando.
Lo que sabemos
- El CAPSAT declaró la supresión de la Constitución y la formación de un consejo de transición.
- El consejo incluirá al Ejército, la Gendarmería y la Policía Nacional, con posible incorporación de civiles.
- Se suspendieron las actividades del Senado, del Tribunal Constitucional y del Tribunal Superior de Justicia.
- La Asamblea Nacional votó la destitución del presidente Andry Rajoelina; él dijo haber huido a un “lugar seguro”.
CAPSAT y el consejo de transición
El anuncio del CAPSAT plantea un periodo de transición con un plazo máximo de dos años para “reconstruir los cimientos de la nación”, según el comunicado militar. Dentro de ese periodo, el órgano militar anunció la intención de celebrar un referéndum constitucional.
El nuevo consejo fue descrito como integrado por fuerzas de seguridad; la comunicación señaló además la posibilidad de sumar civiles. No se detallaron nombres de los integrantes ni el mecanismo para incluir a actores civiles.
“Vamos a asumir nuestras responsabilidades, vamos a tomar el poder”. — coronel Michael Randrianirina
Acciones del poder judicial y el Legislativo
La Alta Corte Constitucional declaró la vacancia de la presidencia e instó al coronel Randrianirina a ejercer las funciones de jefe del Estado. Ese pronunciamiento acompañó el anuncio militar sobre la suspensión de órganos judiciales.
La Asamblea Nacional votó la destitución de Andry Rajoelina con 130 votos a favor entre 131 diputados presentes. Pese a ello, el comunicado del CAPSAT indicó que la Asamblea continuaría funcionando durante la transición.
Las instituciones suspendidas, según la nota militar, fueron:
- Senado
- Tribunal Constitucional
- Tribunal Superior de Justicia
Protestas, violencia y contexto social
El golpe se produjo en medio de manifestaciones masivas iniciadas desde el , lideradas por jóvenes que denunciaban cortes de electricidad y agua y acusaciones de corrupción contra el presidente.
La ONU informó que la represión dejó al menos 22 muertos y cientos de heridos durante las protestas. Las autoridades militares no han publicado un balance propio sobre víctimas ni un plan de seguridad para las próximas horas.




















































































