Mar Caribe, frente a costas de Venezuela.— Un buque tanque panameño, Centuries, fue confiscado este sábado tras ser señalado por la Casa Blanca de transportar petróleo de la estatal PDVSA y operar como parte de una supuesta «flota fantasma» para evadir sanciones.
Lo que sabemos
- El buque Centuries, de bandera panameña, fue incautado en el mar Caribe frente a Venezuela.
- La Casa Blanca afirmó que transportaba crudo de PDVSA y lo calificó como «buque de bandera falsa».
- La operación contó con Guardia Costera y fuerzas armadas de Estados Unidos; la acción se difundió en video por la secretaria de Seguridad Nacional.
- Medios, incluido The New York Times, indican que Centuries no figura en la lista de sancionados de EU y tendría vinculación con una empresa china.
- Caracas calificó la incautación como «robo y secuestro» y denunció la «desaparición forzada» de la tripulación.
Operación estadounidense en el mar Caribe
Autoridades de Estados Unidos difundieron un video de la intervención en el que participan la Guardia Costera y miembros de las Fuerzas Armadas. La secretaria de Seguridad Nacional mostró la acción públicamente y las autoridades dijeron que continuarán persiguiendo el movimiento ilícito de petróleo sancionado.
La Casa Blanca, por medio de su portavoz Anna Kelly, atribuyó al buque el transporte de crudo de la empresa estatal venezolana PDVSA y lo describió como parte de una red para burlar sanciones. Las agencias no dieron a conocer más detalles operativos sobre la custodia de la embarcación.
«buque de bandera falsa»
Propiedad del Centuries y vínculos con PDVSA
Informes de prensa, incluido The New York Times, señalan que el Centuries no aparece en la lista de sancionados por Estados Unidos. Esas mismas fuentes indican que la embarcación pertenecería a una empresa con sede en China y que transportaba crudo venezolano hacia refinerías en Asia.
La Casa Blanca y funcionarios estadounidenses sostienen que la flotilla identificada como «fantasma» se usa para eludir controles financieros y comerciales. Las investigaciones sobre la titularidad real del buque y las cargas ahora forman parte del expediente abierto tras la incautación.
Reacción de Caracas y situación de la tripulación
El gobierno venezolano calificó la acción como «robo y secuestro» y la tildó de «piratería». Además denunció la «desaparición forzada» de la tripulación, según comunicados oficiales citados por medios.
Por ahora no se han publicado listados completos de los tripulantes ni detalles sobre su paradero en fuentes oficiales independientes. La diferencia de versiones mantiene la disputa diplomática entre Caracas y Washington sobre la legalidad y motivos de la operación.






























































































