Tokio, Japón.— Monjes budistas tocaron la gran campana del templo Zojoji a la medianoche del , en el inicio del shōgatsu, mientras bailarines y miles de personas salieron a las calles.
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Puntos clave
- La tradicional campana del templo Zojoji se hizo sonar en la transición de año.
- El shōgatsu, festival de Año Nuevo, se celebra hasta el 3 de enero.
- Bailarines actuaron frente al edificio del Gobierno Metropolitano de Tokio durante la cuenta regresiva.
- Calles y templos se llenaron de fieles y ciudadanos tras la medianoche.
ritual en el templo Zojoji
En Zojoji, los monjes realizaron el toque ceremonial de la gran campana, parte central de la conmemoración del shōgatsu. La ceremonia marcó la llegada del nuevo año y siguió las prácticas budistas que acompañan a esta festividad.
El acto congregó a devotos y visitantes que se acercaron al recinto para escuchar las campanadas y presentar ofrendas. La secuencia se repite cada año como rito de purificación y buenos augurios para el periodo entrante.
Celebraciones en las calles y el Gobierno Metropolitano de Tokio
En torno al edificio del Gobierno Metropolitano de Tokio, un grupo de bailarines ofreció presentaciones durante la cuenta regresiva, combinando espectáculo y tradición urbana. Los actos se realizaron en espacios públicos con afluencia de espectadores.
Tras la medianoche, las avenidas próximas se llenaron de ciudadanos y fieles que continuaron las celebraciones. Las escenas incluyeron tanto expresiones religiosas como manifestaciones culturales y recreativas en la vía pública.
Año Nuevo en Tokio: shōgatsu hasta el 3 de enero
El shōgatsu se extiende oficialmente hasta el , periodo en el que millones de japoneses visitan templos y santuarios. Estas visitas buscan oraciones por salud, prosperidad y protección para el año entrante.
Las autoridades locales y los recintos religiosos informan aforos altos en los primeros días del año. La combinación de actos litúrgicos y eventos callejeros caracteriza la celebración y atrae tanto a residentes como a turistas.
