Suspensión inmediata de la certificación de intercambio estudiantil
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció la revocación con efecto inmediato de la certificación de la Universidad de Harvard en el Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio. La medida fue firmada por la secretaria Kristi Noem y deja sin validez la acreditación que permitía a la institución inscribir nuevos participantes extranjeros.
El Gobierno del presidente Trump prohíbe a la Universidad de Harvard inscribir a estudiantes extranjeros.
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— Joaquín López-Dóriga (@lopezdoriga) May 22, 2025
A partir de esta decisión, Harvard queda impedida de matricular a cualquier solicitante internacional. Los estudiantes que ya estaban inscritos bajo el programa tienen la obligación de trasladarse a otra universidad o enfrentar la pérdida de su estatus migratorio.
Denuncias de entornos inseguros en campus universitario
El DHS argumenta que la universidad permitió ambientes “inseguros” en sus instalaciones, generando un clima de hostilidad entre la comunidad estudiantil. Según el comunicado oficial, se habrían tolerado actos de acoso físico y verbal contra determinados grupos.
La administración señala que estas conductas fueron realizadas por colectivos etiquetados como antiestadounidenses y proterroristas, quienes, según las autoridades, habrían aprovechado la permisividad institucional para llevar a cabo sus agresiones.
Acoso físico reportado dentro de instalaciones
Entre los señalamientos figura la falta de respuesta ante incidentes de agresión física que se produjeron en espacios académicos y recreativos. El DHS sostiene que Harvard no implementó mecanismos de protección adecuados para las víctimas.
La documentación oficial menciona varios episodios en los que estudiantes resultaron intimidados por grupos organizados, sin que mediara una intervención o investigación efectiva por parte de la universidad.
Hostigamiento verbal hacia estudiantes judíos
Los informes destacan un patrón de insultos y amenazas verbales dirigidas en particular a estudiantes de origen judío. Las autoridades federales acusan a la universidad de omisión ante estas conductas discriminatorias.
Según el DHS, la falta de actuaciones concretas para sancionar a los responsables favoreció la persistencia de un entorno de intimidación y exclusión.
Presunto incumplimiento de la normativa federal
El argumento central de la revocación sostiene que Harvard incumplió las obligaciones legales de actuar contra el acoso y la discriminación. Las normas del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio establecen la obligación de garantizar un entorno educativo seguro.
Al no atender las quejas ni adoptar medidas sancionatorias, la universidad habría infringido los requisitos federales que regulan la certificación de instituciones para recibir estudiantes internacionales.
Repercusiones en el estatus migratorio de estudiantes internacionales
La decisión del DHS obliga a los actuales beneficiarios del programa a solicitar su traslado a otras universidades antes de perder su condición legal en Estados Unidos.
De no completar el proceso de transferencia, estos estudiantes podrían quedar en situación irregular y enfrentarse a la cancelación de sus visados bajo las normas de inmigración vigentes.
