Culiacán, Sinaloa.— Un trabajador de una yarda del piggy back narró que fue privado de la libertad junto a otras 20 personas la noche del sábado 15 de noviembre y liberado tras una llamada que permitió la llegada del Ejército alrededor de la madrugada.
Lo que sabemos
- Ocurrió en las yardas del piggy back, al sur de Culiacán.
- Los presuntos agresores eran ocho civiles armados, de 17 a 25 años.
- Las víctimas permanecieron retenidas aproximadamente 7 horas.
- El rescate se produjo gracias a una llamada que alertó a un retén militar.
Relato del trabajador sobre la privación en piggy back
El testigo explicó que alrededor de las 19:00 del sábado 15 de noviembre un grupo de ocho hombres arribó a las yardas y subió por la fuerza a los trabajadores a una tráila. Los agresores colocaron a las personas «pecho tierra», les quitaron los teléfonos y exigieron las llaves de los tráileres.
Según el trabajador, los presuntos sicarios detectaron que las unidades tenían GPS y empezaron a desmantelar piezas para localizar y desactivar los dispositivos. Todos los empleados señalaron la ubicación de las llaves, pero los agresores no lograron evitar la trazabilidad por completo.
El dueño de una yarda envió a cuatro personas a revisar la ausencia de respuestas de sus trabajadores. Una de ellas habló por teléfono sin cortar la llamada, lo que resultó clave para la posterior intervención militar.
Rescate y llamada que activó al Ejército Mexicano
La persona que mantuvo la llamada escuchó las voces de los agresores y acudió a localizar un retén del Ejército para pedir apoyo. Los militares se movilizaron hasta el piggy back tras la verificación de la información proporcionada por el ciudadano.
Al aproximarse la unidad militar, los presuntos sicarios huyeron y dejaron libres a las 20 personas retenidas. El trabajador detalló que la llegada de los elementos se registró alrededor de , tras cerca de 7 horas de detención.
«cuelga el teléfono, cuelga el teléfono, agacha la cabeza y no digas nada», comentó el trabajador sobre la orden de los agresores; la llamada siguió y permitió detectar la privación.
Atención y denuncia ante la Fiscalía especializada en desaparición
Tras el rescate los militares auxiliaron a los trabajadores y los trasladaron a la fiscalía especializada en desaparición forzada para rendir declaración. Las víctimas proporcionaron sus testimonios y se abrió una carpeta de investigación por los hechos.
La víctima entrevistada prefirió omitir su identidad pero confirmó que no se realizaron disparos durante la intervención y que el operativo del Ejército fue limitado en personal. No se reportaron detenciones en la narración que ofreció el trabajador.
FUENTE: LUZ NOTICIAS




















































































