Plazo y solicitud de propuestas para reactor nuclear lunar
Para alcanzar el objetivo de desplegar un reactor nuclear lunar antes del cierre del primer trimestre del año fiscal 2030, la NASA fijó un plazo de 60 días para publicar la solicitud de propuestas en la industria espacial. Esta convocatoria busca identificar diseños listos para operar en entornos de baja gravedad.
La directiva interna establece criterios técnicos y logísticos obligatorios, con énfasis en la viabilidad de transporte y montaje en la superficie lunar. Los contratistas deberán demostrar experiencia en sistemas energéticos modulares.
Tecnología de microreactor y sistema de energía nuclear en la Luna
El documento exige un sistema de “Fission Surface Power” capaz de generar al menos 100 kilovatios, suficiente para abastecer unas 80 viviendas estadounidenses. La propuesta apunta al desarrollo de microreactores de fisión controlada.
Hasta el momento, ninguno de estos microreactores ha recibido licencia de la Comisión Reguladora Nuclear ni ha sido construido en EE. UU. Por ello, el programa contempla fases de pruebas en tierra antes de su despliegue lunar.
Capacidad del módulo de aterrizaje pesado
El reactor y sus sistemas de soporte vital deberán ser transportados por un módulo de aterrizaje con capacidad de 15 toneladas métricas. Este requisito impone restricciones de diseño en masa, volumen y distribución de carga.
El vehículo de descenso deberá garantizar la integridad de los componentes críticos durante el frenado final y el despliegue automatizado sobre el regolito lunar.
Trámites regulatorios y licencias para reactores pequeños
En mayo, la administración anterior ordenó agilizar los trámites regulatorios para pequeños reactores nucleares, con el fin de adelantar licencias y procedimientos de seguridad. Sin embargo, la Comisión Reguladora Nuclear aún evalúa requisitos técnicos y ambientales.
La complejidad de las evaluaciones podría extender los plazos más allá de lo previsto, lo que plantea un desafío adicional para cumplir con la fecha límite de 2029.
Presión estratégica de China y Rusia en la misión Artemis
China y Rusia planean desplegar su propio reactor lunar a mediados de la década de 2030 y podrían establecer zonas de exclusión alrededor de sus instalaciones. Esta competencia amplía el alcance geopolítico de la carrera lunar.
La posibilidad de restricciones en regiones clave de la superficie lunar añade un factor de riesgo estratégico que condiciona la ejecución de la misión Artemis de la NASA.




















































































