Diariamente, la población de El Quemado, transforma 18 mil litros de leche de vaca en quesos de diferentes tipos para comercializarlos en Mazatlán, Culiacán y otros municipios de la entidad.
La pujante industria del lacteo da trabajo a un buen porcentaje de los habitantes de la comisaría donde viven alrededor de 700 personas. José Antonio Valverde Leyva, propietario de Quesos «Santa Camila», dice que hay por lo menos 10 familias que se dedican a la elaboración de quesos. Algunas familias más, hacen lo mismo pero de manera más artesanal.
Fernando Pucheta Sánchez, dirigente de la Agrupación «Pucheta, Una Mano Amiga» se trasladó hacia dicha comunidad que depende de la sindicatura de El Quelite, donde el principal modo de vivir es la producción y comercialización de lacteos. Al realizar una transmisión en vivo por Facebook, el ex alcalde y lider social invitó a la población a consumir lo que se produce localmente para ayudar a centenares de familias que han visto mermada su economía por la crisis que se vive a nivel mundial a consecuencia del impacto del Coronavirus.
El ganadero e industrial José Antonio Valverde dijo que la actividad se redujo en un 30 por ciento, pero confían en que pronto se recuperen todos los sectores y con ello se eleven las ventas. Sin embargo y pese a las afectaciones, la industria quesera ha tratado de no despedir personal.
En El Quemado se trabaja con la producción de alrededor de 90 productores lecheros de la región. Elaboran desde queso fresco, oreado, cotija, chester asadero y chihuahua. Pucheta Sánchez exhortó al público a no abandonar a quienes con mucho esfuerzo han tratado de no descansar a la gente, a los negocios familiares que con mucho empeño continuan insistiendo en mantener sus actividades que dan salud y estabilidad económica a comunidades enteras.
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