Inspección ambiental en Navolato Sinaloa
Tras reportes de devastación de manglar en isla Cortés, inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) visitaron el sitio los días 8 y 9 de julio. El recorrido incluyó mediciones, registro fotográfico y la delimitación del polígono afectado.
La zona inspeccionada abarca 26.88 hectáreas dentro del desarrollo Nuevo Altata. En ese espacio se proyecta el fraccionamiento “Lotes Exclusivos Manglares” sin contar con la autorización ambiental correspondiente.
Visita de verificadores de la Profepa
Durante la inspección se constató un relleno de arena marina extraída del dragado en el estero Pelícanos. Este material está contenido por un muro de concreto prefabricado que carece de permiso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
También se detectaron obras de cimentación y una vialidad adoquinada de 7.20 metros de ancho, parte de la cual cruza el polígono sujeto a revisión. Ninguna de estas intervenciones cuenta con la autorización ambiental específica.
Clausura temporal parcial del proyecto inmobiliario
Como medida de seguridad y con base en el artículo 170 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEPA), Profepa colocó sellos de clausura parcial en la infraestructura y en una excavadora presente en el sitio.
La decisión responde al riesgo inminente de daño o desequilibrio ecológico por las actividades no autorizadas. La suspensión temporal parcial afecta únicamente las áreas inspeccionadas.
Sellos de clausura y acciones inmediatas
Los sellos se colocaron en puntos estratégicos de la obra, incluyendo accesos y equipos pesados. Esto impide continuar labores hasta resolver las irregularidades detectadas.
La Profepa elaborará un acta administrativa que detallará las anomalías y las obligaciones de los responsables para restablecer las condiciones ambientales.
Remoción de manglar y obras no autorizadas
Se identificaron áreas con remoción de mangle blanco (Laguncularia racemosa), mangle prieto (Avicennia germinans) y mangle botoncillo (Conocarpus erectus). Estas acciones carecen de autorización y ponen en riesgo funciones ecológicas clave.
El relleno de arena marina, extraído sin permiso, y el muro de contención de concreto modifican el perfil costero y afectan la regulación natural de inundaciones.
Las obras de cimentación y la vialidad adoquinada alteran la dinámica de suelos y drenaje del ecosistema. La falta de autorización de Semarnat agrava el riesgo de deterioro ecológico.
El avance sin permiso incrementa la vulnerabilidad de la zona costera y debilita la protección de acuíferos y hábitats de fauna marina.
Falta de autorización en manifestación de impacto ambiental
El plan maestro del Desarrollo Nuevo Altata cuenta con una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), pero sus condicionantes exigen autorizaciones independientes para cada proyecto.
El fraccionamiento “Lotes Exclusivos Manglares” no tramitó MIA propia, ni incluye permiso para remoción de manglar o rellenos en zona costera.
En el procedimiento administrativo que sigue se determinarán las medidas correctivas y, en su caso, las sanciones conforme a la legislación ambiental vigente.
La Profepa está facultada para vigilar ecosistemas costeros y asegurar que toda construcción cuente con permisos de Semarnat para impacto ambiental y cambio de uso de suelo.




















































































