El presidente ruso declaró que un plan de paz propuesto y respaldado por Estados Unidos podría servir como base para un acuerdo que ponga fin al conflicto entre Rusia y Ucrania, iniciado en , pese a objeciones ucranias y europeas.
Puntos clave
- Rusia considera que el plan de paz apoyado por EE. UU. puede ser una base negociadora.
- Versiones filtradas señalan cesiones territoriales, reducción militar y límites al ingreso a alianzas.
- Ucrania y aliados critican que las condiciones favorecerían a Rusia y legitimarían conquistas.
- Hay riesgo de afectar la credibilidad de la seguridad colectiva en Europa.
Contenido filtrado del plan de paz propuesto
Las versiones publicadas del plan describen medidas que implican cambios territoriales y capacidades militares. Esas propuestas incluyen exigencias que Ucrania considera inaceptables para su soberanía.
Entre las condiciones reportadas figuran reducciones significativas del ejército ucranio y restricciones sobre su posible adhesión a alianzas militares como la OTAN.
- Cesiones territoriales a favor de Rusia.
- Reducción del tamaño y capacidades del ejército ucranio.
- Limitación del ingreso a alianzas militares internacionales.
Rechazo de Ucrania y posiciones de los aliados
Ucrania y varios de sus socios han rechazado la propuesta por considerar que legitima conquistas obtenidas por la fuerza. Señalan que aceptar cesiones y recortes militares dañaría la integridad territorial del país.
Los críticos advierten que una paz basada en concesiones podría no impedir futuras agresiones y debilitaría la disuasión colectiva en el continente.
Reacciones internacionales y argumento ruso
Algunos gobiernos europeos mostraron alarma ante el contenido del plan y resaltaron riesgos para la estabilidad regional a mediano y largo plazo. Temen que aceptar condiciones desiguales siente un precedente peligroso.
Rusia y quienes respaldan el plan argumentan que la propuesta podría terminar la guerra que, según ellos, ninguno de los bandos parece poder ganar por la vía militar. Plantean la «normalización» del estatus político como alternativa.
Qué está en juego para la seguridad europea
El debate no solo aborda la paz inmediata sino el futuro del orden de seguridad en Europa. Aceptar cesiones territoriales podría debilitar la posición ucraniana y erosionar principios como la integridad territorial.
Expertos y aliados temen que una salida desigual derive en una «paz armada» e incertidumbre prolongada, y que socave la credibilidad de alianzas como la OTAN frente a amenazas futuras.




















































































