Expresiones controvertidas de líder sindical sobre participación femenina en el sindicalismo
Durante el Encuentro Nacional de Mujeres Sindicalistas en la Cámara de Diputados, el dirigente de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (Catem), Pedro Haces Barba, generó malestar con sus comentarios. El acto tenía como fin visibilizar la participación femenina en espacios laborales y sindicales.
En dos ocasiones, Haces Barba hizo referencia a las asistentes con el término “viejerío”, lo que provocó incomodidad entre las delegadas y una reacción de risas nerviosas en el auditorio.
👎 El lamentable comentario de Pedro Haces en el Encuentro Nacional de Mujeres Sindicalistas: «cómo que los apantalló tanto viejerío»
El líder sindical y diputado de Morena, @PedrohacesO brindó un mensaje a las mujeres que acudieron al Encuentro Nacional de Mujeres Sindicalistas… pic.twitter.com/nucR22wJho
— Político MX (@politicomx) August 5, 2025
Uso de términos despectivos contra las mujeres
La primera alusión se produjo al saludar a los cuatro presidentes invitados, afirmando que estaban “muy sentaditos, como que los apantalló tanto viejerío”. El lenguaje utilizado rompió la formalidad del evento y resaltó un enfoque peyorativo.
La segunda mención incluyó el exhorto “No se hagan chiquitos, son a toda madre el viejerío”, una expresión que pretendió ser coloquial pero que resultó ofensiva para muchas de las participantes.
Reacciones y críticas al lenguaje misógino
Tras los comentarios, varias asistentes y observadoras cuestionaron el uso de un discurso cargado de machismo en un foro dedicado a promover la equidad de género en el sindicalismo. La expresión “viejerío” fue señalada como un reflejo de actitudes retrógradas.
En plataformas digitales se compartieron valoraciones críticas sobre el incidente, destacando la necesidad de renovar el lenguaje laboral y sindical para favorecer la inclusión y el respeto hacia las mujeres.
Reconocimiento de la labor de Catem y reivindicación de género
A pesar de las críticas, el diputado insistió en que en el mundo laboral la mitad de los trabajadores son mujeres y que, dentro de Catem, impulsa de manera activa la incorporación femenina en cargos de representación. Esta defensa buscó alinearse con la promoción de la equidad sindical.
No obstante, el tono despectivo de los comentarios contrastó con el propósito del encuentro de fortalecer la visibilidad de las mujeres en estructuras gremiales y cuestionó la coherencia entre discurso y práctica organizativa.
Implicaciones para la representación femenina y equidad sindical
El episodio pone en relieve los desafíos que persisten para alcanzar una verdadera paridad en los liderazgos sindicales, donde a menudo coexisten discursos inclusivos con actitudes patriarcales. El uso de lenguaje despectivo puede minar la credibilidad de las iniciativas de equidad de género.
La discusión sobre la reforma del sindicalismo y la promoción de la participación femenina se intensifica cuando las expresiones de un dirigente evidencian tensiones entre el discurso institucional y las prácticas culturales arraigadas.




















































































