Cooperación federal y cruce fronterizo de familiares de Ovidio Guzmán
El pasado viernes, un total de 17 parientes de Ovidio Guzmán López ingresaron a Estados Unidos bajo un supuesto esquema de cooperación federal. Entre ellos se contaron su madre, su hermana, cuñados y varios sobrinos que cruzaron a pie por el puente de San Ysidro. Portaban equipaje voluminoso y cerca de 70 000 dólares en efectivo, un detalle que incrementó la atención en el operativo.
Al otro lado del cruce fronterizo, agentes del FBI los recibieron y los procesaron mediante el programa de “parole humanitario”, diseñado para autorizar estancias temporales en situaciones excepcionales. Se trató de un procedimiento acelerado que evitó los canales migratorios habituales.
La naturaleza de esta entrada masiva, vinculada a un acuerdo con autoridades federales, genera cuestionamientos sobre la transparencia y alcance de esta modalidad de asistencia humanitaria. El paso de una familia con historial vinculado al crimen organizado reabre el debate sobre la aplicación de la ley en la zona fronteriza.
Programa de parole humanitario y operativo de alto riesgo
El programa de “parole humanitario” permite a personas en situaciones de emergencia cruzar legalmente con autorización temporal, pero en este caso cobró relevancia la dimensión de seguridad fronteriza. Se desplegó un francotirador en un edificio adyacente al sitio de cruce para mitigar posibles atentados.
Este operativo de alto riesgo involucró personal especializado en inteligencia y protección táctica. La presencia de agentes armados y medidas de seguridad reforzadas buscó garantizar el control del flujo y la integridad de los implicados durante todo el traslado.
La utilización de un autobús especial para el traslado posterior refuerza la idea de un protocolo estricto, similar a los planes de contingencia en juicios de alto perfil. La complejidad de esta logística contrasta con el procedimiento estándar en otros casos de parole humanitario.
Implicaciones de reubicación, protección y nueva identidad
Según la exautoridad al frente de HSI en Ciudad Juárez, este grupo recibirá reubicación en áreas seguras, protección federal, cambio de identidad y apoyo económico temporal. Estos beneficios suponen un paquete integral de asistencia migratoria excepcional.
La medida de otorgar residencia temporal y respaldo financiero se presenta como un incentivo para la cooperación con investigaciones internacionales. Sin embargo, el alcance de estas garantías abre dudas sobre precedentes y criterios de selección de beneficiarios.
Negociaciones previas y planificación estratégica
Óscar Hagelsieb, exdirector de HSI, afirmó que este tipo de negociaciones suele planificarse meses antes de una extradición o entrega de un líder criminal. La antelación en los acuerdos sugiere un nivel de preparación y coordinación entre agencias de ambos países.
La estrategia de pactar condiciones con familiares de un presunto capo indica un cambio en la dinámica de cooperación internacional, con fases de diálogo y compromisos previos al traslado efectivo de personas vinculadas al crimen organizado.
