Muro fronterizo, estructura perimetral y control migratorio
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, ofreció una conferencia en el muro fronterizo ubicado en El Paso, en Santa Teresa, Nuevo México, donde describió la estructura como una barrera física diseñada para limitar el acceso irregular. Durante el acto señaló que el muro es «muy muy difícil de escalar», aunque admitió que no resulta imposible superarlo.
Today marks seven months of @POTUS Trump’s second term. When we got to work, America faced the worst border crisis in history. Today, that crisis isn’t just under control— it’s been obliterated.
This wall is part of the difference. Too high to climb. Too narrow to squeeze… pic.twitter.com/pPxfVWVSCU
— Secretary Kristi Noem (@Sec_Noem) August 20, 2025
En el mismo acto se informó que, como parte de las acciones para el control migratorio, el gobierno propondrá intervenciones en la superficie del muro. La medida fue presentada como una respuesta directa a los flujos de migrantes y a la necesidad declarada de reforzar la vigilancia en la línea limítrofe.
Anuncio de pintura negra como medida disuasoria
Noem anunció que se pintará la estructura de color negro con el argumento de que la superficie se calentará con la exposición solar y resultará incómoda al tacto, dificultando así la escalada. Según su exposición, la iniciativa fue solicitada por el presidente y pretende aplicarse a lo largo de la frontera sur.
En el evento estuvieron presentes miembros de la patrulla fronteriza y se reprodujeron afirmaciones oficiales sobre la política migratoria vigente. Durante la intervención se reiteraron frases del discurso presidencial que califican la frontera como la más segura de la historia, enmarcando la pintura como una medida preventiva adicional.
Pintar de negro: estrategia térmica, efecto disuasorio y argumentos técnicos
La justificación técnica presentada sostiene que aplicar una capa de pintura negra incrementará la absorción de calor en la superficie, elevando su temperatura y generando incomodidad al contacto. Este enfoque fue descrito como una medida cautelar destinada a reducir la posibilidad de escalada directa sobre la barrera.
Se informó que la intención es extender el pintado a la totalidad de la frontera sur, sin detallar de forma pormenorizada el cronograma de ejecución ni los criterios técnicos para la aplicación. La explicación pública se centró en el efecto térmico y su presunto carácter disuasorio frente al cruce irregular.
Implicaciones prácticas y consideraciones operativas
El anuncio careció de especificaciones sobre materiales, pruebas de campo o estudios de seguridad que respalden la eficacia de la pintura como herramienta de disuasión. Tampoco se presentaron datos técnicos sobre resistencia térmica, durabilidad del recubrimiento o riesgos para personas que entren en contacto con la superficie.
En el comunicado oficial se evitó precisar el alcance logístico y las consecuencias operativas del pintado masivo, tales como mantenimiento, costos y posibles efectos secundarios sobre equipos o infraestructura adyacente. La medida fue planteada de forma general sin desglosar esos elementos básicos de implementación.
Datos oficiales, flujos de migrantes y vigilancia fronteriza
De acuerdo con informes del Departamento de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), durante julio se registró una disminución catalogada como «histórica» en el número de cruces irregulares. Ese dato fue citado por autoridades como parte del contexto para nuevas acciones en la frontera.
El Departamento de Seguridad Nacional declaró que el gobierno busca «mantener a salvo a Estados Unidos de las drogas, el tráfico y el cruce irregular de migrantes», enmarcando las medidas dentro de sus mandatos de seguridad. Las cifras oficiales se presentaron como soporte para justificar la continuidad de operaciones y nuevas intervenciones físicas.
Presencia de la patrulla fronteriza y medidas adicionales de control
En el lugar del anuncio, la presencia de agentes de la patrulla fronteriza fue destacada como elemento de respaldo a las medidas planteadas. Las autoridades enfatizaron la coordinación institucional para aplicar las directrices orientadas al control de la línea limítrofe.
Además de la propuesta del pintado, en el discurso se mencionaron objetivos más amplios relacionados con la vigilancia y la reducción del tráfico ilícito y del cruce irregular. Esos objetivos fueron enunciados sin detallar indicadores concretos de seguimiento ni metodologías de evaluación de resultados.




















































































