Maltrato y crueldad animal: perrito macheteado en colonia Aquiles Serdán, Culiacán
El viernes 22 de agosto un hombre atacó con machetazos a un perro en vía pública en la colonia Aquiles Serdán, Culiacán. El hecho fue presenciado por menores que alertaron a los vecinos tras escuchar los gritos en la calle.
El agresor aseguró que el animal se había metido a su domicilio y había matado a dos gallinas y dos pollos, sin presentar pruebas ni evidencia. Vecinos del sector refirieron que esa versión era falsa y que el perro mostraba temor hacia el hombre porque supuestamente lo golpeaba o corría con él con frecuencia.
La agresión ocurrió en un espacio público y dejó al animal con heridas por arma blanca; testigos y residentes relataron los hechos a una organización de protección animal que difundió el caso.
Víctima canina ‘Scooby’ — perro callejero herido y situación del animal
Scooby es descrito por vecinos como un perro en situación de calle que llegó a la colonia Aquiles Serdán y que ha sido alimentado y cuidado por moradores por compasión. La familiaridad con la comunidad contrastó con el miedo que mostraba hacia el agresor.
Tras el ataque, la fundación que informó del caso reportó el estado del animal y la necesidad de atención; el relato de residentes indica que Scooby vivía entre los domicilios del sector y que su interacción con las personas era limitada debido a episodios previos de maltrato.
Vecinos y testigos: auxilio comunitario, alarma y respuesta de emergencia
Pequeñas niñas que estaban cerca presenciaron la agresión y comenzaron a gritar, lo que motivó que varios vecinos se acercaran para auxiliar. Los residentes relataron que intentaron contener la situación y proteger al perro tras el ataque.
La comunidad declaró que se realizó el llamado al número de emergencias para solicitar apoyo, indicando la presencia del agresor con un machete, y expresó su preocupación por la seguridad en la vía pública.
Respuesta policial y atención del 911
Según el reporte de los vecinos, el llamado al 911 no tuvo respuesta efectiva: las autoridades policiales no acudieron al lugar pese a la alerta sobre el agresor armado con un machete. Esa falta de llegada fue señalada por residentes como un fallo en la atención.
La ausencia de una intervención inmediata dejó la situación sin control en el momento de los hechos y motivó que la organización protectora y los vecinos buscaran otras vías para denunciar y documentar el ataque.
Fundación Balto y Togo: denuncia, inspección municipal y exigencias sobre bienestar animal
La fundación Balto y Togo hizo público el caso del perro identificado como Scooby y solicitó a las autoridades municipales, a través de los órganos de inspección y vigilancia, que actúen conforme a la normativa vigente. La organización puso énfasis en la necesidad de revisar las condiciones en las que se mantienen animales en la zona.
Entre las demandas, la fundación apuntó que las gallinas referidas en la versión del agresor se encontraban en una jaula en malas condiciones y recordó la prohibición de mantener este tipo de animales en zona urbana, solicitando la actuación administrativa correspondiente.
Denuncia formal ante la Vicefiscalía Zona Centro y medidas solicitadas
Tras los hechos, representantes de la fundación y vecinos se presentaron en la Vicefiscalía Zona Centro para interponer la denuncia formal contra el agresor por maltrato y crueldad animal. La presentación de la denuncia busca que se inicien las investigaciones y las sanciones que correspondan.
La organización pidió además que el presunto agresor sea supervisado y considerado como un peligro potencial, dejando constancia de los episodios previos de hostigamiento y violencia relacionados con su comportamiento hacia animales y personas del sector.
Casos previos similares: patrón de agresiones en Culiacán y violencia con machete
La fundación señaló que en las últimas semanas se registraron incidentes parecidos en distintos puntos de la ciudad, incluyendo un caso ocurrido hace dos semanas en la colonia Industrial El Palmito y otro el sábado anterior en la sindicatura de El Tamarindo. Esos episodios muestran una recurrencia de agresiones con machete en la región.
En El Tamarindo, además del ataque a un animal, se reportó una agresión a una persona en la que un individuo entró por la fuerza a un domicilio y la lesionó con un machete, provocando heridas dolosas y amenazas a una adulta mayor. Desde entonces, las víctimas señalaron hostigamiento continuo del presunto agresor pese a la existencia de una denuncia previa.
Los relatos de residentes y organizaciones de protección animal enfatizan la presencia de un patrón de violencia con armas blancas que ha afectado tanto a animales como a personas en distintos sectores de la ciudad.




















































































