Inseguridad en Culiacán y cierres de negocios locales
La inseguridad en Culiacán ha derivado en el cierre definitivo o temporal de más de dos mil negocios locales durante los últimos diez meses, según el registro de la Unión de Comerciantes de Culiacán. Esta cifra refleja el deterioro de las condiciones de seguridad que limitan la operación cotidiana de pequeños y medianos comercios.
Durante los periodos de mayor violencia, la incidencia delictiva obligó a bajar la cortina de establecimientos que no contaban con las garantías mínimas de protección. El abandono de varias zonas comerciales ha acentuado la percepción de riesgo entre propietarios y clientes.
Variación diaria de cierres en junio y julio
En junio y julio se registró un promedio de hasta ocho comercios cerrados por día, un ritmo inusual en la última década para la capital sinaloense. Esta dinámica coincidió con incrementos en delitos de alto impacto reportados en diversas colonias.
La aceleración de cierres diarios evidencia la presión ejercida por grupos criminales y la falta de mecanismos de contención efectivos. Para muchos empresarios, este patrón representa una señal de alerta sobre la sostenibilidad de sus inversiones.
Afectación por giros comerciales y marcas emblemáticas
Del total de establecimientos afectados, 70 % correspondía a comercios de artículos generales, 20 % a puestos y locales de alimentos frescos y preparados, y el resto a otros giros diversos. El desequilibrio en la distribución de cierres muestra el impacto más fuerte en el sector retail local.
Entre las marcas que abandonaron sus operaciones figuran cadenas y franquicias con presencia histórica en la ciudad. La salida de negocios como A La Moda, Flexi, Contempo y Tortas Mr. Leo reduce la oferta comercial y debilita la variedad de proveedores disponibles para la población.
Impacto económico estimado y pérdidas millonarias
Organismos empresariales calculan que la ola de cierres generó pérdidas superiores a 20 000 millones de pesos en términos de inversión en infraestructura, mercancía y gastos operativos. Esta cuantificación abarca daños directos e indirectos en el comercio local.
El monto estimado refleja la acumulación de costos asociados a cierres inesperados, reposición de stock y adaptaciones de seguridad. La cifra sitúa a Culiacán entre las zonas de mayor afectación económica por violencia en el país.
Empleo formal e informal afectado por la violencia
La clausura de más de dos mil negocios dejó sin empleo formal a más de 7 000 trabajadores, según datos de la misma organización empresarial. Esta pérdida laboral afecta tanto a empleados de planta como a personal de mostrador y mantenimiento.
Si se considera al sector informal, el número de personas impactadas por la inseguridad podría llegar a 20 000, dado que muchos mercados y tianguis también sufren disminución de afluencia y ventas. El desempleo creciente agrava la precariedad en diversas comunidades.
Proyección de cierres ante falta de control de la violencia
La Unión de Comerciantes advierte que, de no contenerse los episodios delictivos, la cifra de negocios clausurados podría triplicarse para diciembre de 2025. Esto implicaría la pérdida de miles de empresas adicionales y un desplome mayor en la actividad comercial.
Varios propietarios operan con márgenes de ganancia negativos y enfrentan la decisión de abandonar el mercado en las próximas semanas. El aumento de la vulnerabilidad comercial podría derivar en un colapso del tejido económico local si no se implementan medidas de seguridad efectivas.




















































































