Incendio intencional en unidad de transporte público

El jueves 24 de abril por la tarde, un autobús detenido en el tráfico de Cabo San Lucas fue objeto de un ataque deliberado. Un grupo de sujetos encapuchados se acercó al vehículo y le prendió fuego con intenciones claras de provocar daños a la unidad.

El incidente se registró en una de las avenidas principales del municipio de Los Cabos, en Baja California Sur, y fue captado por cámaras de seguridad instaladas en los semáforos cercanos.

Desarrollo del ataque en Cabo San Lucas

Los agresores portaban prendas oscuras y cubrieron su rostro con pasamontañas antes de acercarse al autobús. Utilizaron algún tipo de acelerante para que las llamas se propagaran rápidamente por el interior y el exterior de la carrocería.

Tras el estallido de fuego, varios transeúntes alertaron a los pasajeros y al conductor para evacuar. Nadie resultó lesionado, pero el autobús quedó completamente dañado y fuera de servicio.

Repercusión en el servicio de transporte masivo

Este suceso representa el segundo incendio de un autobús en la misma ciudad en menos de 24 horas. El primero fue atribuido a una presunta falla mecánica en el sistema de frenos.

La serie de incidentes ha generado preocupación entre los usuarios del transporte público y las autoridades locales, ya que afecta la seguridad y la confianza en el servicio de movilidad urbana en Los Cabos.

Atención a los pasajeros y respuesta de emergencia

En ambos incendios, los viajeros abandonaron la unidad antes de que se propagaran las llamas de forma significativa, lo que evitó lesiones graves. El personal de emergencias llegó en cuestión de minutos para controlar el fuego.

Las compañías de transporte activaron protocolos para desviar rutas y reforzar revisiones mecánicas en el resto de la flota, con el fin de minimizar riesgos y garantizar la continuidad del servicio.

Investigación sobre hechos violentos recientes

Las autoridades de Baja California Sur indagan si existe alguna relación entre este atentado y recientes actos violentos en la región. Se revisan grabaciones de videovigilancia y se recaban testimonios de testigos que presenciaron el suceso.

Personal pericial analiza los restos del autobús para determinar el tipo de acelerante utilizado y el punto de origen del fuego. Estas indagaciones podrían esclarecer si se trató de un ataque aislado o parte de una cadena de incidentes.