México.— Los inventarios de gas LP en el país están en niveles “críticos”, advierten especialistas y la industria; la falta de almacenamiento y el modelo de suministro aumentan el riesgo de desabasto para hogares ahora.
Puntos clave
- inventarios de gas LP en México reportados como “críticos”, con riesgo “grave” de interrupciones.
- El modelo de suministro tipo “just-in-time” reduce márgenes de reserva y eleva la vulnerabilidad.
- Robo y distribución irregular (“huachigas”) afectan al mercado formal y disuaden denuncias.
- Cerca del 80% de los hogares que usan gas LP podrían enfrentar cortes si la situación persiste.
Inventarios de gas LP y riesgo de desabasto
Especialistas y representantes del sector describen los inventarios como críticos, lo que coloca al abasto en situación de “grave” riesgo si no se corrige la capacidad de reserva. La advertencia se centra en la operativa actual, que no contempla márgenes amplios ante variaciones.
La escasez afecta tanto la disponibilidad para hogares como la estabilidad del mercado formal de distribución. Las lluvias recientes y afectaciones logísticas ya han resultado en racionamientos informales en regiones del centro del país.
Causas identificadas: logística, modelo «just-in-time» y mercado ilícito
La infraestructura para almacenaje, transporte y distribución se considera insuficiente y requiere inversiones privadas mayores. Empresas del ramo señalan que la capacidad actual no soporta interrupciones prolongadas en la cadena logística.
El esquema operativo está basado en un modelo “just-in-time”, que reduce inventarios en planta y obliga a depender de entregas puntuales. Esa práctica deja poco margen ante retrasos y aumenta la probabilidad de racionamientos.
Además, el robo y la distribución irregular, conocidos como “huachigas”, erosionan la rentabilidad del mercado formal y elevan el riesgo para distribuidores que temen represalias al denunciar.
Medidas propuestas por la industria y prioridades
La asociación mexicana de distribuidores de gas licuado y empresas conexas plantea que políticas de control rígidas de precios desalientan la inversión en infraestructura. Reclaman cambios regulatorios para atraer capital privado.
Para enfrentar la situación, se proponen acciones concretas:
- Fomentar inversiones privadas para aumentar capacidad de almacenamiento.
- Mejorar redes de transporte y distribución del gas LP.
- Fortalecer colaboración entre autoridades y distribuidores para combatir el “huachigas” y crear mecanismos de denuncia seguros.
- Revisar la política de precios y considerar reservas estratégicas y diversificación de fuentes.
Las medidas apuntan a dar margen ante variaciones logísticas y a reducir la vulnerabilidad del servicio doméstico. Sin cambios, el sector advierte que el riesgo para el suministro persistirá.




















































































