Desaparición de estudiante mexicano en las aguas de Green Island
El 30 de mayo, Diego Dorantes Sánchez, un joven de 23 años originario de Ixmiquilpan, Hidalgo, desapareció mientras practicaba snorkel en la playa Dabaisha de Green Island, Taiwán. Las versiones oficiales indican que fue arrastrado por una corriente cercana a la costa durante el Festival del Barco del Dragón.
La condición de estudiante y su procedencia mexicana cobraron relevancia en las gestiones iniciales. Desde el primer momento, familiares y autoridades locales centraron los esfuerzos en delimitar el área de búsqueda y establecer un perímetro de vigilancia en los accesos a la playa.
Circunstancias del incidente
Testigos en el lugar relataron que la corriente marina se intensificó sin previo aviso, generando un flujo de agua que se llevó al joven más allá de la zona de snorkel permitido. Según informes preliminares, el punto exacto de la desaparición presentaba variaciones rápidas en la fuerza de la corriente.
El momento de la festividad y la afluencia de visitantes en Dabaisha contribuyó a que las autoridades locales debieran coordinarse con rapidez. La cercanía de otras embarcaciones y grupos de bañistas obligó a reorganizar el operativo para evitar interferencias y garantizar la seguridad de terceros.
Operativo de búsqueda y salvamento ante fuertes corrientes marinas
Las fuertes corrientes marinas que caracterizan la zona de Green Island obligaron a desplegar un operativo de búsqueda y salvamento por mar y aire. Equipos de dron, embarcaciones de la guardia costera local y buzos especializados participaron en las labores de rastreo.
La dinámica del mar dificultó el establecimiento de rutas seguras para los buzos, lo que obligó a variar los horarios de inmersión y las zonas de patrullaje. Esta adaptación permanente buscó optimizar los tiempos y reducir riesgos para los rescatistas.
Recursos desplegados por las autoridades locales
Las embarcaciones de la guardia costera taiwanesa mantuvieron un patrullaje continuo alrededor de la costa de Green Island. Simultáneamente, drones equipados con cámaras de alta resolución sobrevolaron la superficie del mar en amplios trayectos.
También se incorporaron unidades de buceo con experiencia en corrientes intensas, capaces de operar bajo protocolos de seguridad estrictos. Estos buzos especializados realizaron inmersiones en sectores cercanos a arrecifes donde se consideró más probable hallar indicios del joven.
Apoyo consular y coordinación internacional en el rescate
La Oficina de Enlace de México en Taiwán acompañó a la familia de Diego Dorantes Sánchez en las gestiones con las autoridades locales. Su intervención buscó agilizar trámites y garantizar información permanente sobre el estado del operativo de búsqueda.
Además, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México solicitó el apoyo de la Guardia Costera de Japón para ampliar el radio de rastreo, ante la posibilidad de que las corrientes hubieran desplazado al joven más allá del perímetro insular.
Acciones de la Secretaría de Relaciones Exteriores
La dependencia mexicana coordinó el intercambio de información con sus contrapartes en Taiwán y Japón, facilitando la movilización de recursos técnicos. Estas gestiones se realizaron sin dilaciones, manteniendo la prioridad en la localización del estudiante.
El seguimiento consular incluyó la recepción de reportes diarios, comprobación de recursos asignados y acompañamiento directo a los familiares en la comunicación con los equipos de rescate. De este modo se buscó mantener la transparencia en cada fase del operativo.
