En una noticia que ha causado gran revuelo en los medios de comunicación, se ha revelado que los cuatro ciudadanos estadounidenses que fueron secuestrados en Matamoros, Tamaulipas, tendrían antecedentes penales relacionados con delitos contra la salud.
Según fuentes extranjeras, se habría descubierto que los ciudadanos en cuestión habían tenido problemas con la ley en Estados Unidos.
El pasado 7 de marzo, las autoridades mexicanas informaron que habían localizado a las víctimas en El Tecolote, a varios kilómetros de donde ocurrieron los hechos. Dos de las víctimas habían fallecido y dos estaban con vida. Sin embargo, un día después se filtraron las fichas de antecedentes penales de los ciudadanos estadounidenses, lo que ha dado un nuevo giro a la investigación.
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Antecedentes
Según el medio británico DailyMail, Eric Williams había sido arrestado anteriormente en Estados Unidos por distribuir crack y cocaína cerca de una escuela.
Latavia McGee había sido arrestada varias veces en los últimos años, la última en enero de 2022 por conducta ilegal hacia un menor de edad relacionado con el consumo de anfetaminas.
Shaeed Woodard quien fue asesinado también habría sido detenido por fabricación y posesión de drogas, y se había declarado culpable de los delitos en una corte estadounidense.
Finalmente, el segundo fallecido Zindell Brown había sido acusado de posesión de marihuana o hachís, así como de violencia doméstica en primer grado en julio de 2019.
Según las primeras versiones, los ciudadanos estadounidenses habrían venido a México para que la mujer se sometiera a una cirugía estética en el abdomen en una clínica de Matamoros. Sin embargo, supuestamente fueron confundidos como criminales haitianos, con quienes miembros de un brazo armado del Cártel del Golfo tienen conflictos por el territorio.
