Impacto del homicidio en la comunidad educativa
La comunidad educativa de la escuela primaria Rafael Ramírez se encuentra en estado de conmoción tras el homicidio de Alexa, de 7 años, y Leydi, de 11. La magnitud de la tragedia ha generado un ambiente de profunda inquietud entre profesores, alumnos y padres de familia.
El suceso ocurrió cuando las menores regresaban a Culiacán después del reciente “puente” escolar y perdieron la vida en un enfrentamiento en Badiraguato. Este incidente ha cuestionado los protocolos de vigilancia en las rutas de transporte escolar.
Símbolos de luto en la escuela primaria
En la entrada principal de la escuela se colocó un gran moño negro como señal de duelo y solidaridad con las familias afectadas. El elemento, ubicado en el acceso peatonal, se ha convertido en punto de concentración de mensajes y flores.
Dentro de los salones, se observaron carteles con mensajes de apoyo a las alumnas y llamados a la memoria de Alexa y Leydi. Estas manifestaciones gráficas reflejan la tensión y el dolor presente en el entorno educativo.
Reacciones colectivas de docentes y padres
Docentes y padres de familia participaron en el funeral de ambas menores y exigieron acciones concretas para garantizar la seguridad de los estudiantes. Durante la ceremonia, se registró un ambiente de reclamo hacia las autoridades sin muestras de euforia.
La manifestación de pesar incluyó la colocación de ofrendas florales en las inmediaciones del plantel y pancartas con demandas de justicia. Estas iniciativas pusieron de relieve la crítica de la comunidad ante la falta de medidas preventivas.
Guardias de silencio estudiantil
Estudiantes de diferentes grados se unieron en guardias de silencio frente a la entrada de la escuela, manteniendo un ambiente sobrio y respetuoso. El gesto buscó visibilizar la gravedad del suceso y solidarizarse con las familias afectadas.
Durante estos actos, se escucharon mensajes alusivos a la memoria de las menores y llamados al fortalecimiento de la vigilancia en las rutas escolares. Este tipo de participación reafirma la urgencia de revisar los protocolos de traslado.
Suspensión de actividades y exigencia de seguridad escolar
Las autoridades escolares decidieron suspender las actividades académicas para acompañar a las familias en el último adiós de las dos alumnas. La medida se mantuvo durante el día del funeral y generó debate sobre la continuidad de clases tras eventos violentos.
Ante este contexto, la comunidad ha intensificado el clamor por un entorno más seguro para niñas y niños, señalando la urgencia de reforzar la seguridad escolar y los protocolos de traslado. El debate se centra ahora en evitar que se repitan tragedias de esta naturaleza.
