En Mazatlán, Sinaloa, durante la inauguración del acueducto La Concordia, el gobernador Rubén Rocha Moya propuso al presidente Andrés Manuel López Obrador no dejar su cargo como presidente, a lo que el mandatario respondió firmemente adhiriéndose a su principio de “Sufragio efectivo no reelección”, en comparación con Francisco I. Madero. Esta propuesta del gobernador se dio en medio de manifestaciones en contra de su gobierno por parte de militantes del Partido Sinaloense (PAS) y trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), quienes mostraron su descontento con cánticos de “¡fuera Rocha!”.
Esta situación política tensa en el estado también está vinculada con la inhabilitación por seis meses del exsecretario de Salud, Héctor Melesio Cuen Ojeda, para ejercer cargos públicos, sanción impuesta por supuestas omisiones en su declaración patrimonial de noviembre de 2021 comunicada por la Secretaría de Transparencia y Rendición de Cuentas de Sinaloa.
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En su discurso durante la inauguración del acueducto, que distribuirá agua potable a 13 comunidades del municipio, Rocha Moya elogió la visión “humanista” del presidente y resaltó los logros en materia de abastecimiento de agua durante el gobierno de la transformación, en contraste con los 36 años de gobiernos neoliberales donde, según sus palabras, no se llevó agua a ninguna hectárea. Pese a la propuesta de Rocha Moya y su deseo expresado ante cientos de pobladores de que el presidente no abandone el cargo, la audiencia respondió con negación y el presidente AMLO mantuvo su postura de no buscar la reelección, utilizando la figura de Madero como ejemplo.
Es importante destacar que este acontecimiento se enmarca en la situación política actual de México, en la que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha insistido en diversas ocasiones en su compromiso con la no reelección, uno de los principios fundamentales de la Revolución Mexicana y consagrado en la Constitución de 1917.
